La Dirección de Desarrollo Comunitario, DIDECO, fue catalogada por el alcalde de Chillán, Camilo
Benavente, como el corazón del municipio, un espacio donde las necesidades de los habitantes de
la urbe son expresadas en búsqueda de una solución.
Considerando esta impronta de la administración municipal, la directora de DIDECO, Pilar
Gutiérrez, entregó algunos lineamientos sobre los cuales se basa la gestión que comenzó hace dos
meses, tiempo en el que destacan la puesta en marcha del Centro de Atención Integral, el anuncio
de las delegaciones municipales y el cambio de la imagen corporativa.
La directora, quien es chillaneja y abogada de profesión, adelantó que se trabaja en el cambio de
la lógica en la atención, buscando humanizar el servicio público, generando trabajo en equipo y
otorgando empatía con los usuarios y usuarias. “Estamos reorganizando una estructura que estaba
extremadamente atomizada, pero también trabajamos en mejorar las prácticas laborales y
también las condiciones de trabajo, específicamente en la infraestructura que era algo que estaba
en condiciones críticas, tal como lo señaló nuestro alcalde en distintas oportunidades”, dijo Pilar
Gutiérrez.
De la mano de lo anterior, las oficinas de calle Isabel Riquelme, se trasladaron a Arauco 983 (ex
Escuela 4), en lo que se ha denominado nuevo “Centro de Atención Integral”, donde se instalarán
todos los equipos de DIDECO que guardan relación con la atención de los usuarios y usuarias y
donde existe una sala de espera amplia que permite el distanciamiento social y condiciones de
ventilación necesarios en tiempos de pandemia. Pero no solamente se realizarán las atenciones
propias de la Dirección de Desarrollo, ya que también “se instalarán módulos en los cuales
estamos invitando a los sectores públicos del gobierno central que requieran un espacio para
desde este lugar atender juntos como servidores públicos a nuestras vecinas y vecinos de acuerdo
a lo que la gente necesita”, agregó la directora, quien asumió el 12 de julio.
Un ejemplo de lo anterior es gestionar un convenio con el Departamento de Extranjería,
entendiendo que la facultad no es del municipio, sino que del gobierno central. Actualmente la
Oficina de Extranjería está en Bulnes, sin embargo, la mayor concentración de extranjeros está en
Chillán, por lo tanto “estimamos necesario y urgente una alianza de la Delegación Presidencial, con
PDI y Registro Civil para definir junto a DIDECO un día de atención de los migrantes para que
puedan ir a la Escuela 4 en el Centro de Atención Integral y efectivamente resolver su demanda”.
Oficina de Asuntos religiosos
El concepto de inclusión no es sólo una intención para la directora de DIDECO, ya que entre los
desafíos existe la creación de una Oficina de Asuntos Religiosos, como una manera de dejar de
manifiesto que todas las creencias son bien recibidas en la ciudad y contar con una organización
con la cual se pueden generar una serie de trabajos sociales importantes.
“Esperamos que las organizaciones comunitarias trabajen mucho más allá de lo que son las juntas
de vecinos, el alcalde ha solicitado que armemos una Oficina de Asuntos Religiosos, vamos a
empezar a trabajar en un proyecto, pensando en que la Dirección de Desarrollo Comunitario sea
efectivamente un espacio para todas y todos, si la comunidad está organizada tienen que tener
claro que cuentan con un lugar al cual recurrir y ser apoyados para su más amplio desarrollo”,
sentenció.
La petición del alcalde Camilo Benavente a Pilar Gutiérrez tiene una base, ya que la directora de
DIDECO se desempeñó en la Secretaría General de la Presidencia como jefa de administración y la
Oficina Nacional de Asuntos Religiosos pertenece a la Segpres. “Ya me comuniqué con la gente
que está a cargo y vamos a empezar a darle forma, mirando algunas experiencias de algunos
municipios que ya lo tienen establecido”.
Atención de emergencias
Otro de los focos que busca la nueva administración a través de su Dirección de Desarrollo
Comunitario, es optimizar el tiempo y calidad de respuesta ante diversas emergencias como
incendios, inundaciones u otros daños producto de los efectos de la naturaleza o errores
humanos.
Pilar Gutiérrez relató que se dispone de un equipo de asistentes sociales que va a terreno “apenas
tenemos la alerta o la información de algún tipo de siniestro, antes la ayuda consideraba una
evaluación en terreno, después se volvía a la oficina, se hacía un informe y a partir de eso se veía si
la ayuda era o no pertinente, pero ahora vamos inmediatamente con un ayuda preliminar y se
realiza en el acto la evaluación de pertinencia de la ayuda, lo que nos permite atender de manera
mucho más personalizada y rápida las necesidades de nuestra gente” .
Dicha ayuda inmediata corresponde -según las necesidades- a alimentos, material de
construcción, colchones, carbón, y otros, sin embargo, se está preparando propuesta para adquirir
nuevos insumos como medias aguas con mayores estándares de calidad buscando que otorgue
mayor dignidad a quien la reciba ante la contingencia. “Estamos analizando la posibilidad de que
por ejemplo las mediaguas sean forradas e incluyan literas, para que así la gente también tenga
solucionado el tema de donde pone los colchones y con ello se hace un uso más eficiente del
espacio, pero también consideramos la pronta inclusión de otras cosas como un kit sanitario,
cocinilla a gas, estufa en tiempos de frio entre otros, para acompañar como municipalidad de
manera más íntegra a las personas que tanto lo necesitan sobre todo en momentos de especial
conmoción y fragilidad.”
